¿Por qué no te escapas hoy?

¿Por qué no te escapas hoy? / Yo prefiero salir corriendo / a estrellarme de frente con el vacío / del tiránico 09:00 a 11:00 de esta maldita mañana; / prefiero torcerle el cuello a mi rutina / que sentarme a rumiar la espera desesperada, / a releer el compendio de las desgracias del día / que yo mismo redacté en la víspera. / ¿Por qué no te escapas hoy? / Podríamos huir, como dos adolescentes / ardientes e irresponsables / para que nos pierda el rastro nuestra adultez, / para que no nos vea ni el polvo / que ya se nos acumula sobre tanta pretenciosa sapiencia. / ¿Por qué no te escapas hoy? / Y viajamos hasta llegar al mar / a ver cómo las olas se pelean conmigo / por acariciar tu delicioso talle / y mojar de sales tus senos perfumados. / ¿Por qué no te escapas hoy? / y me aceptas un café entre besos; / beberemos caminando por las calles, / como aquella vez / sin ocultarnos de los que pasan / y nos miran a través del parabrisas / de sus vidas opacas, sin pasión. / ¿Por qué no te escapas hoy? / Y repasamos nuestra historia juntos / desnudos, en la oscuridad, / perdidos en un cuarto de hotel / y nos cantamos canciones de amores desesperados / de esos plenos, sin bendición y sin trámites. / Como el nuestro.